Bogotá, Colombia, 13 de agosto de 2020 – Las autoridades ecuatorianas deben investigar pronta y exhaustivamente la amenaza contra el caricaturista Xavier Bonilla, garantizar que éste cuente con la protección adecuada, y someter al responsable a la justicia, declaró hoy el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
El 6 de agosto, Jacobo Bucaram Pulley, hijo del expresidente Abdalá Bucaram Ortiz, tuiteó un mensaje amenazante dirigido a Bonilla, quien es caricaturista del diario ecuatoriano El Universo, según la organización defensora de la libertad de prensa Fundamedios, con sede en Quito, y el testimonio del propio Bonilla, quien habló con el CPJ por una aplicación de mensajería.
En el tuit, que ya ha sido borrado pero del que Fundamedios logró hacer una captura de pantalla, Bucaram Pulley escribió: “Dios te salve y te proteja que no te encuentre porque como hombre vas a tener que defenderte maldito HDP”.
Bonilla, más conocido por el seudónimo “Bonil”, declaró que no había denunciado las amenazas ante las autoridades, pero señaló que agentes policiales se habían comunicado con él y le habían dicho que vigilarían su casa ante posibles amenazas a su seguridad. El 11 de agosto, Freddy Carrión Intriago, Defensor del Pueblo de Ecuador, divulgó un comunicado en el cual instaba a la Fiscalía General a investigar las amenazas contra el caricaturista.
“Las autoridades ecuatorianas deben investigar a fondo la amenaza efectuada contra el caricaturista Xavier Bonilla, garantizar su seguridad y someter al responsable a la justicia”, declaró Natalie Southwick, coordinadora del Programa de Centroamérica y Sudamérica del CPJ, desde Nueva York. “Las autoridades deben transmitir el firme mensaje de que los ecuatorianos tienen libertad para distribuir y consumir noticias y artículos de opinión, ya sea mediante textos, imágenes o caricaturas”.
Bucaram Pulley envió el tuit en respuesta a una caricatura de Bonilla que salió publicada el 6 de agosto y en la cual Bucaram Pulley aparecía huyendo de las autoridades. Según informaciones de prensa, Bucaram Pulley se encuentra prófugo desde el mes pasado, cuando un juez dictó una orden de captura contra él por su presunta participación en la venta de insumos médicos a sobreprecio a hospitales públicos que hacían frente a la pandemia de la COVID-19.
Bonilla declaró al CPJ que con frecuencia es blanco de insultos en las redes sociales por sus caricaturas, y que en un principio había ignorado la amenaza, pero que su preocupación aumentó cuando un testigo que había colaborado con la Justicia en el proceso por enriquecimiento ilícito fue asesinado en el interior de una penitenciaría el 8 de agosto.
Ayer, el expresidente Bucaram Ortiz fue arrestado como parte de la investigación sobre el asesinato del testigo, según versiones periodísticas.
“No pensé que corría riesgo, pero nunca se sabe lo que puede pasar”, declaró Bonilla al CPJ.
El CPJ llamó a la Fiscalía General para obtener una declaración, pero nadie atendió la llamada.
En 2014, durante la presidencia de Rafael Correa, las autoridades le ordenaron a Bonilla “rectificar” una caricatura y le aplicaron una multa de unos USD 95.000 a El Universo por imprimirla.
En el informe especial del CPJ “Trazando la línea”, publicado en 2015, el CPJ concluyó que los caricaturistas con frecuencia son objeto de acoso porque sus ilustraciones satíricas, ya sean abiertas o encubiertas, comunican ideas políticas complejas de una forma accesible y que repercute en públicos masivos.