São Paulo, 18 de enero de 2018–Las autoridades brasileñas deben realizar una investigación exhaustiva del asesinato del periodista Ueliton Bayer Brizon, y hacer que los responsables comparezcan ante la justicia, declaró hoy el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
En la mañana del 16 de enero, un sujeto desconocido asesinó a tiros a Brizon cuando el periodista llevaba a su esposa al trabajo, en la ciudad de Cacoal, en el estado amazónico de Rondônia, según compañeros del periodista e informaciones de prensa.
El sujeto le disparó a la motocicleta en que viajaba la pareja, y provocó que la esposa, quien no fue alcanzada por las balas, se cayera, declaró al CPJ Siderlandio Simões de Oliveira, presidente de la Asociación de la Prensa Cacoalense.
El atacante entonces le disparó tres o cuatro veces a Brizon; el periodista llegó sin vida al hospital, según versiones noticiosas.
El CPJ no logró comunicarse con la familia inmediata de Brizon ni por Facebook ni por vía telefónica para obtener sus declaraciones.
“Las autoridades deben investigar con rapidez y seriedad el asesinato de Brizon y enjuiciar a los responsables”, declaró Robert Mahoney, subdirector ejecutivo del CPJ, desde Nueva York. “El asesinato de Brizon es una perturbadora señal tras un período de dos años en que los casos de asesinato de periodistas brasileños han disminuido, y es un triste recordatorio de que los periodistas brasileños que cubren asuntos de carácter local siguen enfrentando significativos riesgos por ejercer su labor”.
El funcionario policial a cargo de investigar el asesinato de Brizon no devolvió las repetidas llamadas efectuadas por el CPJ.
No obstante, informaciones de la prensa local indicaron que la Policía no había realizado ningún arresto y que seguía todas las líneas de investigación.
La Asociación Nacional de Periódicos de Brasil instó a las autoridades a llevar a cabo una celera investigación debido a la preocupación de que “la impunidad… es un serio problema en nuestro país”.
Brizon, de 35 años, era propietario y el único periodista del Jornal de Rondônia, que se centraba en noticias sobre Cacoal, ciudad de unos 80,000 habitantes, declaró de Oliveira.
Brizon también era miembro del Partido Humanista de la Solidaridad y concejal suplente del partido. No ocupaba ningún cargo político.
De Oliveira y otros colegas afirmaron que no conocían de ninguna amenaza contra Brizon.
Pese a algunos avances en la lucha contra la impunidad por los crímenes contra periodistas y al significativo declive en los asesinatos de periodistas en los dos últimos años, los medios brasileños continúan enfrentando significativas amenazas. Los datos del CPJ muestran que 38 periodistas brasileños han sido asesinados desde 1992 por ejercer la profesión.