Nueva York, 3 de marzo de 2015–El Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) condena el asesinato del periodista de radio colombiano Edgar Quintero y exhorta a las autoridades a realizar una investigación exhaustiva sobre todos los motivos posibles y a encontrar a los responsables del crimen. Quintero es el segundo periodista asesinado en Colombia en menos de tres semanas.
El lunes por la tarde, un hombre armado no identificado a bordo de una motocicleta disparó múltiples veces contra el periodista mientras ingresaba a una panadería en Palmira, una ciudad en el departamento sudoccidental de Valle del Cauca, según informes de prensa. La panadería está cerca de las oficinas de Radio Luna, donde trabajaba el periodista.
Quintero, conocido como “Quintín”, conducía un programa diario de noticias y comentarios llamado “Noticias y Algo Más” en Radio Luna, periodistas locales afirmaron al CPJ. Con frecuencia criticaba al gobierno local y a funcionarios policiales en su programa y debatía temas sensibles como la corrupción, según la Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP) y Edison Hidalgo, un reportero de la emisora local Radio Palmira, quien dialogó con el CPJ.
Hidalgo sostuvo que Quintero había calificado de “ladrones” a los funcionarios de la previa administración durante su programa de radio y que el periodista había recibido amenazas hace más de un año. Hidalgo indicó que no conocía el contenido de las amenazas o si Quintero había informado sobre las amenazas a las autoridades.
El jefe de la policía de Palmira, Coronel William López, señaló al CPJ que las autoridades aún no habían identificado a ningún sospechoso o algún motivo posible, pero estaban investigando el asesinato. López indicó a la FLIP que no sabía si Quintero había recibido amenazas poco antes de su muerte.
“Edgar Quintero es el segundo periodista asesinado en Colombia en menos de tres semanas”, afirmó Carlos Lauría, coordinador senior del programa de las Américas del CPJ. “Las autoridades deben actuar de inmediato para garantizar la seguridad de todos los periodistas colombianos y asegurar que estos dos casos no se conviertan en los últimos ejemplos del lamentable record de impunidad que ostenta Colombia”.
El periodista de radio y aspirante a político Luis Antonio Peralta Cuéllar, quien con frecuencia difundía informes críticos sobre la corrupción política, fue asesinado a balazos el 14 de febrero en la ciudad sureña de Doncello, en el departamento de Caquetá. El CPJ está investigando el caso para determinar si el crimen de Peralta estuvo vinculado a su labor como periodista. Los reporteros que informan sobre temas sensibles en Colombia, como el conflicto armado de varias décadas, han enfrentado violencia e intimidación en los años recientes, según la investigación del CPJ.
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[NOTA DEL EDITOR: Esta alerta se ha actualizado en el séptimo párrafo para corregir la ortografía del nombre de Luis Antonio Peralta Cuéllar.]