Nueva York, 16 de septiembre de 2010–Las autoridades hondureñas deben investigar en profundidad el ataque armado que sufrió el martes el periodista Luis Galdámez Álvarez, afirmó hoy el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés). Desconocidos armados en la capital del país, Tegucigalpa, abrieron fuego contra Galdámez afuera de su casa, aseguró al CPJ el periodista, quien salió ileso del ataque.
Galdámez, reportero de la emisora nacional Radio Globo y del canal Globo TV, estaba ingresando a su domicilio en Villa Centroamericana alrededor de las 11.30 p.m. cuando individuos armados escondidos detrás de un arbusto dispararon contra él al menos en ocho ocasiones, el periodista indicó al CPJ. Galdámez y su hijo dispararon a los asaltantes con posterioridad, según la prensa hondureña. El reportero afirmó que tanto él como su hijo compraron armas luego que desconocidos dispararan contra él mientras conducía su automóvil en 2005.
Las autoridades locales no han identificado ningún sospechoso ni posibles motivos detrás del ataque, aseguró el periodista.
Galdámez afirmó que ha recibido amenazas de muerte desde que el ejército hondureño depuso al Presidente Manuel Zelaya en junio de 2009. Es conocido por su oposición al golpe de estado y al gobierno del Presidente Porfirio Lobo. En su programa “Tras la Verdad”, informa regularmente sobre corrupción en el gobierno y violaciones a los derechos humanos supuestamente cometidas por las fuerzas de seguridad, afirmó al CPJ el director de noticias de Radio Globo, David Romero.
“Condenamos el ataque contra Luis Galdámez e instamos a las autoridades a investigar en profundidad el incidente y enjuiciar a los responsables”, afirmó Carlos Lauría, coordinador senior del programa de las Américas del CPJ. “Es momento de que el gobierno hondureño ponga punto final a esta ola de violencia, que pone en peligro la prensa y afecta el derecho de los ciudadanos a la libre expresión”.
Radio Globo también ha sido blanco de serios ataques y múltiples interrupciones en su transmisión. El 29 de septiembre de 2009, durante el gobierno interino de Roberto Micheletti, la emisora salió del aire luego de que fuerzas de seguridad desalojaran las oficinas y confiscaran los equipos de transmisión. Retomó sus transmisiones el 20 octubre del mismo año.
La Comisión Interamericana de Derechos Humanos, con sede en Washington DC, ordenó en julio de 2009 al gobierno hondureño que proporcionara protección a Galdámez por las repetidas amenazas que padecía. Las autoridades hondureñas nunca cumplieron la orden, indicó el reportero. “Las órdenes de la Comisión Interamericana no significan nada en Honduras”, añadió.
Ocho periodistas han sido asesinados desde en marzo en Honduras, al menos tres en directa represalia por su trabajo, según una investigación del CPJ. En julio, un informe especial del CPJ determinó que existe un trabajo investigativo defectuoso y negligente de las autoridades locales para esclarecer los crímenes.