Eludir los asesinatos

El Índice Global de Impunidad 2014 del CPJ se enfoca en países donde los periodistas son asesinados y los responsables quedan libres

Periodistas protestan en el primer aniversario del asesinato de la periodista Regina Martínez Pérez. Los ataques contra la prensa son tan comunes que las autoridades mexicanas aprobaron una ley que dio mayor jurisdicción a las autoridades federales para enjuiciar crímenes contra periodistas. (AP / Felix Marquez)
Periodistas protestan en el primer aniversario del asesinato de la periodista Regina Martínez Pérez. Los ataques contra la prensa son tan comunes que las autoridades mexicanas aprobaron una ley que dio mayor jurisdicción a las autoridades federales para enjuiciar crímenes contra periodistas. (AP / Felix Marquez)

Por Elisabeth Witchel/ coordinadora de la campaña del CPJ contra la impunidad

Publicado el 16 de abril de 2014

NUEVA YORK
Siria se ha sumado a la lista de países donde los asesinatos de periodistas tienen la mayor probabilidad de quedar impunes, mientras que Iraq, Somalia y Filipinas nuevamente mostraron los peores registros en materia de impunidad, según reveló el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) en su recién actualizado Índice de Impunidad. Las condenas obtenidas en cuatro países representaron un atisbo de buenas noticias.

El ingreso de Siria en el quinto puesto del índice resalta el aumento en la cifra de asesinatos por atentados en ese país, lo cual se convierte en una nueva amenaza para los periodistas que ejercen la profesión. Siria, con cifras sin precedentes de secuestros y elevados índices de muertes en combate y en fuego cruzado, ya era el país más peligroso del mundo para el ejercicio del periodismo. 

Nuevos casos de violencia contra la prensa y la ausencia de procesos judiciales en casos antiguos mantuvieron a Iraq, Somalia y Filipinas en los tres primeros puestos del índice. Iraq, con 100 por ciento de impunidad en un total de 100 casos, ocupa el primero, un puesto que ha conservado desde el comienzo del estudio del CPJ, en 2008. Los periodistas iraquíes, objeto de represalias en cifras récord desde la invasión liderada por Estados Unidos en 2003, tuvieron una tregua en 2012, el primer año en que ningún periodista fue muerto en el ejercicio de la profesión. No obstante, el resurgimiento de los grupos de militantes en todo el país fue responsable del brusco aumento que alcanzó 10 muertes de periodistas el año pasado, de ellos nueve asesinatos.

En concordancia con los cuatro años anteriores, Somalia presenta el segundo peor registro de todos los países del mundo. Otros cuatro asesinatos en 2013 engrosaron las ya alarmantes estadísticas sobre periodistas muertos en represalia por su labor informativa. Elusivos grupos insurgentes armados han sembrado el terror en los medios al margen de las frágiles instituciones de seguridad pública somalíes, pero las autoridades tampoco han investigado de manera adecuada los ataques provenientes de otros actores, según investigaciones del CPJ.

En esta edición del Índice de Impunidad, que calcula el número de asesinatos no resueltos de periodistas como un porcentaje en relación con la población de cada país, el CPJ examinó asesinatos de periodistas ocurridos en cada país en el período comprendido entre 2004 y finales de 2013. Los casos se consideran no resueltos cuando no se han obtenido condenas. Únicamente aquellos países con cinco o más casos sin resolver fueron incluidos en este índice. Este año, 13 países cumplieron con los criterios del índice, en comparación con 12 el año pasado.

Como hechos positivos, en cuatro países presentes en el índice las autoridades obtuvieron condenas; sin embargo, en solamente un caso las autoridades apresaron o enjuiciaron a los autores intelectuales, lo cual refleja un fenómeno global. Filipinas sentenció al asesino del periodista radial Gerardo Ortega a cadena perpetua. Dado que los asesinatos de 51 periodistas están a la espera de que se imparta justicia, este acontecimiento no ha cambiado la posición del país en el índice, que ha permanecido firme en el tercer puesto desde 2010. El historial casi perfecto de Pakistán en materia de impunidad fue quebrado cuando los tribunales condenaron a seis acusados (aunque dos de ellos continúan prófugos) por el asesinato de Wali Khan Babar, hecho ocurrido en el 2011. Los tribunales rusos sentenciaron a un empresario ruso a una pena de siete años de prisión por ordenar la muerte del periodista Igor Domnikov, quien fue asesinado en el 2000, mientras que la justicia de Brasil condenó a los autores materiales de tres asesinatos y, en un caso, también al autor intelectual. En el resto de estos crímenes, los autores intelectuales permanecen libres.

Los legisladores federales de México, país que ocupa el séptimo lugar en la lista, adoptaron en abril de 2013 una ley que implementa una enmienda constitucional que les otorga a las autoridades federales competencia para atraer casos de delitos contra periodistas. Aunque la ley es considerada como un importante paso para el mejoramiento del clima de libertad de prensa, las autoridades aún no han logrado avances significativos en los 16 casos no resueltos de México.

La posición de Colombia en el índice mejoró considerablemente, debido al descenso en las muertes de periodistas en los últimos años, aunque desde el 2009 nadie ha sido condenado por la muerte de un periodista. Si bien Colombia ha tomado medidas para ofrecerles seguridad a los periodistas amenazados, en muchos otros casos los periodistas se han visto obligados a autocensurarse o abandonar sus hogares.

Aunque no se han notado avances en ningún caso de Sri Lanka ni de Afganistán, el CPJ no tiene constancia de ningún asesinato en esos países en el período comprendido entre 2009 y 2013. Por su parte, Nigeria se mantuvo en el índice por segundo año consecutivo, con cinco casos no resueltos. En India, dos periodistas fueron asesinados en 2013, con lo cual la cifra de asesinatos sin procesos judiciales alcanzó el total de siete.

La creciente preocupación de la comunidad internacional ante la ausencia de justicia en los ataques contra los medios se reflejó en la significativa atención que la Organización de las Naciones Unidas le dedicó a esta problemática el año pasado. La UNESCO comenzó a implementar el Plan de Acción de las Naciones Unidas sobre la Seguridad de los Periodistas y la Cuestión de la Impunidad, marco adoptado en 2012. En noviembre, la Asamblea General de la ONU adoptó una resolución en materia de seguridad de los periodistas. La resolución insta a los Estados Miembros a actuar en favor de la impartición de justicia y proclama el 2 de noviembre como Día Internacional para Poner Fin a la Impunidad de los Crímenes contra Periodistas.

Otros hallazgos del Índice de Impunidad del CPJ:

Para consultar una explicación en detalle de la metodología del CPJ, haga clic aquí.

El Índice

A continuación figuran los 13 países donde por lo menos cinco periodistas han sido asesinados sin que se haya condenado siquiera a un solo autor material. El índice abarca asesinatos que ocurrieron entre 2004 y finales de 2013.

1 Iraq

Con 100 periodistas asesinados en los últimos diez años y una impunidad del 100 por ciento, Iraq es el país con el peor registro del Índice de Impunidad, un puesto que ha ocupado desde el 2008, cuando el CPJ por primera vez elaboró el índice. Otros nueve asesinatos ocurridos a finales de 2013, en el contexto del resurgimiento de los grupos de militantes, quebraron un período de inactividad en la violencia fatal contra la prensa. Tres de las víctimas, más dos trabajadores de medios, murieron en un ataque en el cual militantes armados atacaron con explosivos y asaltaron el canal  de televisión Salaheddin en Tikrit el 23 de diciembre. La organización Estado Islámico de Iraq y Levante (ISIS), afiliado a Al-Qaeda, se atribuyó la autoría del ataque, según informes de prensa, y acusó al canal de librar una guerra contra los suníes.

Puntaje en el índice de impunidad: 3.067unsolved journalist murders per million inhabitants
Año anterior: Ocupaba el primer puesto con un puntaje de 2.818

2 Somalia

La prensa ​​enfrenta riesgos cada vez mayores cuando informa en Somalia. Aquí, los periodistas esperan mientras realizan su labor informativa fuera del palacio presidencial. (Reuters / Feisal Omar)

El puntaje de Somalia empeoró por sexto año consecutivo. Aunque la violencia contra la prensa disminuyó levemente a partir de su cifra récord en 2012, los periodistas continúan sufriendo represalias a niveles alarmantes, como lo reflejan los cuatro nuevos asesinatos ocurridos en 2013. Entre los periodistas asesinados se encuentra el periodista radial Mohamed Ibrahim Raage. Apodado  “el Honesto”, Mohamed fue abatido a tiros por pistoleros afuera de su casa, en la ciudad de Mogadishu. El periodista había abandonado Somalia en el 2009 pero había regresado recientemente. El presidente somalí Hassan Sheikh Mohamud se comprometió a abordar la horrible situación de los periodistas en Somalia mediante la creación de una comisión especial, pero la labor de ésta ha arrojado pocos resultados. De los 27 casos de periodistas asesinados en Somalia desde 2005, únicamente uno terminó en condena: las autoridades ejecutaron a un acusado del asesinato del periodista Hassan Yusuf Absuge, ocurrido en 2012. Pero la falta del debido proceso en el caso llevó a muchos observadores a expresar su preocupación ante el hecho.

Puntaje en el índice de impunidad: 2.549 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el segundo puesto con un puntaje de 2.396

3 Filipinas

La condena dictada el  año pasado contra un sicario que en 2011 había asesinado a disparos al periodista investigativo radial Gerardo Ortega, fue un hecho positivo pero que contribuyó poco a reducir la impunidad generalizada en Filipinas, nación que ha ocupado el tercer puesto en el índice desde 2010. Más de 50 casos de periodistas asesinados entre 2004 y 2013 continúan sin resolución, lo cual desvirtúa la afirmación de que “se acabó la impunidad” en Filipinas, efectuada en noviembre del 2013 por la oficina del presidente Benigno Aquino III. Entre las víctimas se encuentran los 32 periodistas masacrados en la municipalidad de Ampatuan, provincia de Maguindanao, en 2009 y el fotógrafo freelance Mario Sy, uno de los tres periodistas asesinados el año pasado. Sy fue ultimado a disparos en frente de su esposa e hija tras la publicación de varias fotografías sobre el tráfico de drogas.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.527 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el tercer puesto con un puntaje de 0.580

4 Sri Lanka

Aunque la guerra civil de Sri Lanka acabó hace casi cinco años, el gobierno encabezado por Mahinda Rajapaksa no ha mostrado ninguna voluntad política para abordar su historial de impunidad absoluta en los nueve asesinatos de periodistas que han tenido lugar durante su mandato, primero como primer ministro y luego como presidente. Se sospecha que funcionarios gubernamentales y militares están implicados en varios de los crímenes, entre ellos el asesinato cometido en 2009 del destacado editor Lasantha Wikramatunga, conocido por sus denuncias, y el asesinato, ocurrido hace casi 10 años, de Aiyathurai Nadesan, conocido por el seudónimo de Nellai G. Nadesan, galardonado periodista que antes de morir había recibido amenazas en respuesta a sus artículos sobre las fuerzas armadas. La impunidad en Sri Lanka es uno de los principales factores que han motivado que una gran cantidad de periodistas hayan decidido marchar al exilio, según investigaciones del CPJ.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.443 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el cuarto puesto con un puntaje de 0.431

5 Siria

Una imagen tomada por la Shaam News Network, una organización de periodismo ciudadano radicada en Damasco, muestra los edificios dañados por intensos bombardeos. (AP / Shaam News Network)

Siria, escenario de un cruento conflicto civil, integró el índice por primera vez este año. Más de 60 víctimas fatales en el gremio periodístico, a consecuencia del fuego cruzado y coberturas riesgosas, así como cifras sin precedentes de secuestros, han convertido a Siria en el país más peligroso del mundo para el ejercicio del periodismo. Ahora, los asesinatos deliberados añaden una nueva amenaza a este panorama. Al menos siete periodistas han sido asesinados en Siria desde 2012, todos con absoluta impunidad. Los responsables pertenecen a todas las partes del conflicto –grupos de militantes islamistas no sirios, rebeldes que toman represalias contra los medios progubernamentales, y las fuerzas del presidente Bashar al-Assad. Entre las víctimas se encuentran periodistas de medios ciudadanos como Abdel Karim al-Oqda, colaborador de la Shaam News Network, una red noticiosa con sede en Damasco que ha subido decenas de miles de videos que documentan la rebelión desde sus inicios en marzo de 2011. Al-Oqda murió cuando las fuerzas de seguridad incendiaron su casa en represalia por su cobertura informativa de la rebelión.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.313 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Siria no figuraba en el índice de 2013

6 Afganistán

Afganistán retuvo el sexto puesto en el índice. No se ha enjuiciado a ninguno de los autores materiales de los cinco asesinatos cometidos en los diez años comprendidos en el índice de este año. Más de siete años pasaron sin que ocurriera ningún asesinato de periodista en Afganistán, aunque la violencia aumentó en 2014. Afganistán es uno de los pocos países donde las víctimas mortales entre los periodistas extranjeros son mayores que entre los periodistas nacionales.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.168 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el sexto puesto con un puntaje de 0.142

7 México

La justicia continúa evadiendo a los periodistas mexicanos, quienes sufren una incesante violencia por informar sobre la delincuencia y la corrupción. Un total de 16 periodistas fueron asesinados con absoluta impunidad durante los últimos diez años y otro fue asesinado en lo que va de 2014. Lo único positivo sucedió en abril de 2013, con la adopción de una ley que implementa una enmienda constitucional que les otorga a las autoridades federales mayor competencia para enjuiciar a los responsables de delitos cometidos contra periodistas. La ley dispone la rendición de cuentas por parte de altos funcionarios del gobierno nacional, con lo cual se evita a los funcionarios de las fuerzas estatales de seguridad pública, más corruptos e ineficaces. Pero los críticos sostienen que la fiscalía especial creada para dirigir tales investigaciones se ha demorado en ejercer sus nuevas facultades. El malogrado proceso judicial en el caso de Regina Martínez Pérez y el sobreseimiento de los cargos contra uno de los pistoleros implicados en el atentado contra J. Jesús Blancornelas, director del semanario Zeta, contribuyeron a intensificar las preocupaciones en el sentido de que el gobierno del presidente Enrique Peña Nieto no tiene la capacidad de enfrentar el desafío de acabar con el ciclo de impunidad y violencia de México.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.132 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el séptimo puesto con un puntaje de 0.131

8 Colombia

Colombia ascendió del quinto al octavo lugar en el índice del CPJ. Este avance tiene que ver menos con la impartición de justicia –nadie ha sido condenado por el asesinato de un periodista desde 2009, cuando tres exfuncionarios públicos fueron sentenciados por planificar el asesinato del comentarista radial colombiano José Emeterio Rivas, hecho ocurrido en 2003– y más con el descenso en general en la cantidad de víctimas fatales entre los periodistas. Problemas tales como fiscales con exceso de casos, la falta de intercambio de información, la manipulación inadecuada de las pruebas y la corrupción judicial pueden dilatar las investigaciones penales por años y dejar a muchas familias en la desesperación a medida que los casos se van acercando a su prescripción, que es de 20 años. La ausencia de procesos judiciales está demostrando ser una amenaza contra la frágil mejora de la situación de la seguridad en Colombia. El asesinato de Édison Alberto Molina, ocurrido en 2013, quebró una pausa de tres años en los asesinatos de periodistas. Molina fue ultimado a balazos mientras regresaba a su casa de la radioemisora donde trabajaba. Una semana antes de su asesinato, Molina, quien en su programa radial frecuentemente denunciaba a funcionarios gubernamentales por actos de corrupción, había recibido una bolsa plástica llena de tierra negra y unos huesos no identific

Puntaje en el índice de impunidad: 0.126 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el quinto puesto con un puntaje de 0.171

9 Pakistán

Periodistas paquistaníes protestan el asesinato de su colega en enero de 2012. (AP / Mohammad Sajjad)

Pakistán mostró una modesta mejora en el índice este año, impulsada por la reciente condena de seis sujetos acusados de asesinar al periodista Wali Khan Babar. No obstante, sólo se ha hecho justicia parcialmente, pues dos condenados continúan prófugos y las autoridades no han logrado descubrir a los autores intelectuales. El caso Babar es un hito alcanzado tras una dura lucha —al menos cinco personas vinculadas al caso han sido asesinadas, entre testigos, informantes e investigadores–, y abre la posibilidad de que las autoridades inicien procesos penales en otros asesinatos no resueltos. El primer ministro Nawaz Sharif declaró a una misión del CPJ que visitó el país en marzo de 2014 que consideraría implementar una amplia gama de medidas basadas en las lecciones del caso Babar, como por ejemplo trasladar los juicios a lugares más seguros y designar fiscales especiales, para impartir justicia en los más de 20 asesinatos de periodistas que el CPJ ha documentado en los últimos 10 años. Mientras tanto, los autores de ataques violentos contra la prensa, que van desde grupos de militantes proscritos como los talibanes hasta organizaciones políticas, emplean la violencia desenfrenada contra los periodistas para censurar y controlar la cobertura informativa.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.123 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el octavo puesto con un puntaje de 0.130

10 Rusia

A pesar de una leve mejora de posición en el índice y de la obtención de una condena en un caso clave, la impunidad todavía marca el paisaje mediático de Rusia, donde no se ha encarcelado a ninguno de los autores de los 14 asesinatos de periodistas cometidos en el período comprendido en el índice. El año pasado, la condena y sentencia de un empresario ruso, el sexto sospechoso procesado en el caso, por encargar el asesinato del periodista Igor Domnikov, cometido en el 2000, fue un hecho positivo, aunque los demás autores intelectuales del crimen todavía no han sido presentados ante la justicia. En un hecho menos positivo, el nuevo juicio realizado a varios acusados del asesinato de la periodista de Novaya Gazeta Anna Politkovskaya, acontecimiento ocurrido en 2006, transcurrió de manera accidentada, mientras que los fiscales no obtuvieron ningún avance en la captura de los autores intelectuales del asesinato. Dos periodistas murieron el año pasado como resultado de ataques. El editor Akhmednabi Akhmednabiyev, de la República de Dagestán, fue víctima de disparos realizados desde un auto, y el periodista ambiental Mikhail Beketov falleció de heridas recibidas en 2008 cuando unos atacantes le propinaron tal golpiza que lo dejaron en estado de coma. Ni un solo sospechoso fue arrestado por la agresión a Beketov, pese a la promesa personal del presidente Vladimir Putin de que se enjuiciaría a los responsables.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.098 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el noveno puesto con un puntaje de 0.099

11 Brasil

En los últimos años, la posición de Brasil en el índice ha subido y bajado a medida que los esporádicos pero significativos avances en la apertura de procesos judiciales contra los asesinos de periodistas eran comparados con los nuevos casos de asesinato. El año pasado, las autoridades lograron condenas en tres casos. En un fallo que sentó precedentes, los tribunales sentenciaron al autor intelectual del asesinato, cometido en 2002, de Domingos Sávio Brandão Lima Júnior, propietario, director y columnista de un diario conocido por su cobertura informativa de la delincuencia organizada. Esta condena hace que el caso sea uno de los pocos a escala mundial en que se logró obtener justicia completa. No obstante, nuevos actos de violencia contra la prensa socavan estos avances. En 2013, tres periodistas fueron asesinados en relación con su labor informativa. El gobierno brasileño se ha comprometido a dar respuestas ante su elevado índice de impunidad y ha sumado su apoyo a nuevas medidas, tales como un proyecto de ley que le otorga a la policía federal competencia para investigar los delitos contra la libertad de expresión cuando existan indicios de fallas o incompetencia por parte de las autoridades de los estados. El grado de adopción e implementación de estas medidas durante los próximos 12 meses será una prueba de fuego de la voluntad política del gobierno para reforzar la lucha por la justicia más allá de la retórica.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.045 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el décimo puesto con un puntaje de 0.046

12 Nigeria

Un impacto de bala en la casa del periodista nigeriano Bayo Ohu, quien fue asesinado en septiembre de 2009. (AFP / Pío Utomi Ekpei)

El sostenido aumento en los asesinatos no resueltos de periodistas en los últimos años provocó que Nigeria estuviera presente en el Índice de Impunidad del CPJ por segundo año consecutivo. Desde el 2009, cinco periodistas nigerianos han sido asesinados en atentados y ninguno de los autores de tales crímenes ha sido procesado judicialmente. El gobierno del presidente Goodluck Jonathan no ha mostrado compromiso para mejorar la eficacia de la justicia en los casos de asesinatos de comunicadores y, por el contrario, intentó restar importancia a los hallazgos del índice del CPJ. Un portavoz presidencial declaró a un diario que el índice “promueve el sensacionalismo en lugar de la verdad” y “no es un reflejo verdadero de los periodistas del país”. El portavoz atribuyó las muertes de periodistas al fuego cruzado de las actividades armadas del grupo insurgente Boko Haram en el norte del país. Los grupos de militantes como Boko Haram sin duda son responsables de las muertes de muchos periodistas nigerianos, pero no de todas. El editor de noticias Bayo Ohu, por ejemplo, fue ultimado a balazos en la puerta de su casa por seis atacantes no identificados, en represalia –de acuerdo con sus colegas–, por sus artículos sobre la política local. Nigeria presenta el segundo peor registro de África en materia de impunidad por los asesinatos de periodistas, solamente superada por Somalia.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.030 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el undécimo puesto con un puntaje de 0.031

13 India

El fracaso de la democracia más populosa del mundo en la impartición de justicia en los asesinatos de sus periodistas la ha mantenido en el índice del CPJ desde su surgimiento, en el 2008. Al menos siete periodistas, todos empleados en publicaciones impresas locales y dedicados a la cobertura informativa de la corrupción, la política o la delincuencia, han sido asesinados en relación con su labor informativa en los últimos diez años. Por lo general, la respuesta de las autoridades ha consistido en la apertura de investigaciones policiales superficiales. Dos periodistas fueron asesinados con impunidad en el 2013. Entre ellos se encuentra Narendra Dabholkar, abatido a disparos por dos sicarios que se desplazaban en motocicletas cuando había salido a caminar temprano en una mañana de agosto. Dabholkar había recibido amenazas en los días previos a su muerte, y con frecuencia publicaba artículos sobre temas sensibles como el suicidio de estudiantes y agricultores, los barrios marginales y el movimiento maoísta indio.

Puntaje en el índice de impunidad: 0.006 casos no resueltos por millón de habitantes
Año anterior: Ocupaba el duodécimo puesto con un puntaje de 0.005

Metodología

El Índice de Impunidad del CPJ calcula el número de asesinatos no resueltos de periodistas como un porcentaje en relación con la población de cada país. Para este índice, el CPJ examinó asesinatos de periodistas que ocurrieron entre el 1 de enero de 2004 y el 31 de diciembre de 2013 y que permanecían sin resolución. Únicamente aquellas naciones con cinco o más casos sin resolver fueron incluidas en este índice.

El CPJ define como asesinato todo ataque deliberado contra un periodista en particular en relación con el trabajo de la víctima. Los asesinatos constituyen más del 70 % de las muertes entre periodistas relacionadas con su labor, según datos del CPJ. Este índice no incluye casos de periodistas caídos en combate o mientras realizaban tareas peligrosas como la cobertura de protestas callejeras.

Los casos son considerados no resueltos cuando no se obtuvo condena alguna. Los datos de población de los Indicadores Mundiales para el Desarrollo de 2012 del Banco Mundial fueron utilizados para calcular el puntaje de cada país.

Tabla estadística

Lugar País Casos no resueltos Población
(en millones)*
Puntaje
1 Iraq 100 32.6 3.067
2 Somalia 26 10.2 2.549
3 Filipinas 51 96.7 0.527
4 Sri Lanka 9 20.3 0.443
5 Siria 7 22.4 0.313
6 Afganistán 5 29.8 0.168
7 México 16 120.8 0.132
8 Colombia 6 47.7 0.126
9 Pakistán 22 179.2 0.123
10 Rusia 14 143.5 0.098
11 Brasil 9 198.7 0.045
12 Nigeria 5 168.8 0.030
13 India 7 1,237 0.006

El Índice de Impunidad del CPJ es elaborado como parte de la Campaña Global contra la Impunidad de la organización, apoyada por la Fundación Adessium, la Fundación John S. y James L. Knight, y Open Society Foundations.

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