Ciudad de México, 22 de enero de 2022 – Las autoridades mexicanas deben investigar exhaustivamente el homicidio del periodista Margarito Martínez y esclarecer si está relacionado con su labor periodística, declaró el sábado el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés). Martínez, reportero gráfico freelance, murió víctima de disparos a manos de un sujeto no identificado frente a su vivienda, en Tijuana, en el norteño estado de Baja California, el 17 de enero, según versiones periodísticas.
Según un comunicado publicado en la página de Facebook de la Fiscalía General del Estado (FGE) de Baja California, Martínez fue emboscado poco después del mediodía frente a su domicilio, en Tijuana, ciudad costera que está situada al otro lado de la frontera con Estados Unidos, frente a la ciudad de San Diego, California. Un sujeto no identificado le disparó varias veces al periodista y huyó del lugar. Martínez falleció antes de que lo trasladaran de urgencia a un hospital.
Según un colega y amigo cercano de Martínez que conversó telefónicamente con el CPJ el miércoles, el reportero gráfico había regresado brevemente a su hogar tras terminar una cobertura y se disponía a salir de nuevo para tomar más fotografías en otra zona cuando lo emboscaron. El colega, quien solicitó el anonimato por motivos de seguridad, declaró al CPJ que desconocía lo que Martínez había estado fotografiando.
“Con la indignante muerte de Margarito Martínez, apenas días después de la muerte a puñaladas del periodista José Luis Gamboa en Veracruz, se desvanece la esperanza de que México pueda convertirse en un lugar más seguro para los comunicadores”, declaró Jan-Albert Hootsen, representante del CPJ en México. “El año pasado México consolidó su horrenda condición como el país más violento del hemisferio occidental para el ejercicio del periodismo y nada cambiará salvo que las autoridades den prioridad a garantizar que los periodistas mexicanos no sean asesinados con impunidad”.
Alfonso Margarito Martínez Esquivel, de 49 años, era un veterano reportero gráfico con más de dos décadas de experiencia en Tijuana, ciudad que, según informaciones de prensa, en los últimos años se ha convertido en una de las más violentas del país. Colaborador independiente especializado en fotografiar escenas de crimen, trabajó para medios mexicanos y extranjeros. Sus fotos aparecieron en el semanario de noticias local Zeta Tijuana, en el periódico La Jornada de Baja California y en el sitio web Cadena Noticias, entre otros medios informativos.
El CPJ efectuó varias llamadas telefónicas a La Jornada de Baja California y Cadena Noticias para obtener una declaración, pero nadie respondió las llamadas. Un editor de Zeta Tijuana accedió a conversar telefónicamente con el CPJ, pero no había devuelto la llamada al momento de publicar esta información.
Según el amigo de Martínez y una colega del periodista que también solicitó el anonimato porque su periódico no le permite ofrecer entrevistas, Martínez había denunciado amenazas en varias ocasiones en los últimos años, y en diciembre de 2021 se había comunicado con las autoridades estatales y federales luego de sostener un altercado con el editor de una página de Facebook conocida por publicar imágenes de hechos de violencia. El altercado fue grabado y publicado en la página de Facebook, que tiene más de 120.000 seguidores.
De acuerdo con el testimonio de sus colegas, Martínez se sintió amenazado e intimidado por la publicación del video y había denunciado el incidente al mecanismo de protección para periodistas de Baja California, que a su vez lo había remitido al Mecanismo de Protección para Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, que es una dependencia de la Secretaría de Gobernación federal, con sede en Ciudad de México.
El 19 de enero, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Baja California anunció en Facebook que había allanado la vivienda de una persona identificada como Ángel “N” en el marco de las investigaciones que realiza sobre el homicidio del periodista, y que había detenido a esa persona para procesarla por el presunto delito de narcomenudeo.
El CPJ no logró encontrar los datos de contacto de Ángel “N” ni de su abogado, y la FGE no respondió las llamadas telefónicas efectuadas por el CPJ para obtener una declaración.
Un funcionario del Mecanismo de Protección federal confirmó al CPJ que ese organismo se había comunicado varias veces con Martínez desde diciembre y le había enviado varios formularios para facilitar su incorporación a un programa de protección, pero que Martínez había dejado de responder. El funcionario solicitó el anonimato, ya que no estaba autorizado a hablar del asunto.
México es el país más violento del hemisferio occidental para el ejercicio del periodismo, según datos del CPJ. En 2021, como mínimo tres periodistas mexicanos murieron asesinados en represalia directa por su labor periodística. El CPJ investiga otros seis homicidios de periodistas para determinar el motivo.