Ciudad de México, 29 de junio de 2021 — Las autoridades mexicanas deben realizar una investigación pronta y transparente sobre la muerte del trabajador de medios Saúl Tijerina Rentería, y determinar si fue blanco de represalias por su trabajo, declaró hoy el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés).
La familia de Tijerina perdió contacto con él en la mañana del 22 de junio, y horas más tarde de esa misma mañana su cadáver fue hallado con varias heridas de arma blanca cerca de su vehículo en Ciudad Acuña, en el norteño estado de Coahuila, según versiones noticiosas.
Ese mismo día, las autoridades de Coahuila anunciaron el arresto de dos sospechosos del homicidio.
Según las versiones noticiosas citadas, Tijerina trabajaba en una fábrica local y también se desempeñaba como operador de dron con cámara, y proporcionaba imágenes a los medios digitales La Policiaca y Noticias en la Web, que publican sus noticias desde Facebook.
“Debido al violento panorama para los medios mexicanos, que tiene como reciente ejemplo el homicidio del periodista Gustavo Sánchez en Oaxaca, es esencial que las autoridades investiguen exhaustivamente el homicidio de Saúl Tijerina Rentería y esclarezcan si su trabajo periodístico pudo haber sido el móvil del crimen”, declaró Jan-Albert Hootsen, representante del CPJ en México. “El ciclo de violencia e impunidad contra la prensa mexicana solamente podrá romperse mediante una rigurosa labor policial y judicial”.
El editor de La Policiaca, Aldahir Mendoza declaró al CPJ en entrevista telefónica que una fuente con conocimiento de la investigación le había dicho que las autoridades habían encontrado un mensaje cerca del cadáver de Tijerina, pero a Mendoza no le habían dicho qué decía el mensaje.
Mendoza señaló que Tijerina había trabajado para La Policiaca durante seis meses aproximadamente, y había suministrado imágenes de hechos noticiosos captadas con la ayuda de un dron y, ocasionalmente, fotografías tomadas con cámaras normales. El editor de Noticias en la Web, quien solicitó el anonimato por temor a sufrir represalias, declaró al CPJ que Tijerina había prestado servicios similares a ese medio digital por unos 10 meses.
Algunos de los más recientes trabajos que Tijerina realizó para Noticias en la Web fueron la captura de imágenes de un simulacro nacional de terremoto que tuvo lugar el 21 de junio, según el editor, quien agregó que Tijerina grababa imágenes de “todo tipo de noticias, inclusive deportes y hechos delictivos y seguridad”.
“Su nombre nunca apareció en la página web, él grababa las imágenes y las noticias llevaban la firma de otros periodistas”, el editor declaró al CPJ. Ambos editores expresaron que desconocían si Tijerina había recibido alguna amenaza de muerte y afirmaron que sus respectivos medios no habían recibido ninguna amenaza recientemente.
Los editores declararon al CPJ que habían escuchado que Tijerina había tenido “problemas” con dos compañeros de trabajo de la fábrica, quienes según ellos pudieran tener vínculos con una banda de narcotraficantes, pero no pudieron brindar ninguna información adicional.
El fiscal general del estado de Coahuila, Gerardo Márquez, anunció que las autoridades habían capturado a dos sospechosos, identificados como Lorenzo N., de 23 años, y Jordi Alejandro N., de 18 años, presuntos integrantes de una banda criminal. En conferencia de prensa ofrecida el 25 de junio, Márquez declaró que la Fiscalía General del Estado no descartaba la labor de Tijerina para los medios como posible móvil del homicidio, pero indicó que también se investigaba si Tijerina tenía alguna relación con la banda.
El CPJ llamó en reiteradas ocasiones a la Fiscalía General del Estado de Coahuila para obtener una declaración, pero nadie contestó.
México es el país más violento del hemisferio occidental para el ejercicio del periodismo, según datos del CPJ. Como mínimo, cinco periodistas mexicanos han perdido la vida en represalia por su labor informativa en 2020.